PERO, ¿ALGUIEN SABE EN ESTE PAÍS LOS IMPUESTOS QUE PAGA?

Carlos Salas, en lainformación.com

Si sumáramos todos los impuestos y los dividiésemos por los días del año, desde el 1 de enero hasta el 10 de mayo el español medio estaría entregando todo lo que gana al Estado.

Ese es el cálculo que sale de sumar el IRPF, el IVA, los impuestos especiales, etc.

El cálculo lo hace todos los años el think tank Civismo. Y decretó que en 2013 el día de la liberación fiscal caía el 10 de mayo. Este año será lo mismo porque seguimos con los mismos impuestos.

Da igual porque en este país la gente no sabe los impuestos que paga. Los salarios se siguen imaginando en neto. La gente no sabe que casi la mitad de un litro de gasolina y una cuarta parte de la factura de la luz se va en impuestos. La gente tampoco sabe que las empresas no sólo pagan el irpf del trabajador sino que abonan otra parte de la seguridad social que no aparece en sus nóminas.

Según Civismo, el trabajador medio español estaría destinando 54 días a pagar el IRPF, 32 al IVA, 23 a la parte de la Se­guridad Social que sale del salario bruto del empleado, 14 a los impuestos espe­ciales y 7 a otros impuestos.

No suman lo que las empresas pagan en cotizaciones a la Seguridad Social, pues en ese caso el día de la liberación fiscal sería en julio.

En total, calculan que cada trabajador destinaría 8.667 euros anuales a la Admi­nistración. No olviden que el salario medio en España es de unos 28.000 euros.

Un informe emitido por la comisión europea en octubre indicaba que España tiene los impuestos más altos. Sólo Bélgica y Suecia castigan más las rentas del trabajo y el capital.

El tipo máximo en el IRPF es del 56% en Cataluña. El más alto de España. Y el impuesto de sociedades es superior al de Suecia, Alemania y Reino Unido. El IVA está entre los más altos de Europa.

Sin embargo, no hay grandes movimientos ciudadanos contra el peso de los impuestos. Los hay contra o a favor de cualquier cosa: privatización, desahucios, gestión de aguas, familias, educación, corrupción… Pero contra el expolio impositivo, ni un grito.

Da la impresión de que los españoles piensan que los impuestos los pagan otros.