INICIATIVAS DE TRANSICIÓN decrecimiento

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El 19 de mayo entrevistarón en La2 a Antonio Scotti, durante el programa “Para Todos”, a las 13h. Este es el enlace de la entrevista: http://www.rtve.es/alacarta/videos/para-todos-la-2/para-todos-2-pueblos-transicion/1105981/
A continuación se facilita el texto integro de la entrevista (en la versión televisada no le dío tiempo a la presentadora de hacer todas las preguntas previstas).


Esta corriente, o este movimiento pretende dar respuesta a los retos del Pico del Petróleo y del Cambio Climático: “los hijos gemelos” de los hidrocarburos (tal y como usted explica en un artículo). Nos gustaría empezar pidiéndole que nos aclare exactamente ¿qué es lo que ocurre con el petróleo?

El petróleo es un recurso energético finito, no renovable, dentro de un planera finito, y como tal su explotación no puede realizarse de manera indefinita y tarde o temprano se agotará si se sigue explotando.
Los yacimientos de petróleo existentes todavía tardarán muchos años en acabarse físicamente, lo que sí se acabará pronto es la era del petróleo barato y del petróleo fácil de extraer. Esto implica que estamos a punto de entrar o incluso es posible que ya hayamos entrado en una era de declive energético para toda la humanidad, un periodo en que tendremos cada año menos petróleo para sostener la sociedad industrializada basada en el crecimiento ilimitado.

Como no hay fuentes alternativas viables al petróleo, en cuanto a eficiencia energética, y como el petróleo se encuentra a la base de casi todas las demás actividades productivas de la sociedad industrializada, si no se decrece inmediatamente y se toman medidas importantes para adaptarnos a la nueva situación el planeta se enfrenta a un colapso económico y de los sistemas ecológicos de soporte a la vida, una situación en la que la humanidad nunca se ha enfrentado hasta ahora.

Optar por el decrecimiento, entonces, es la única solución… ¿Es como dar marcha atrás? ¿O se trata de construir una sociedad nueva?

Desde luego podemos inspirarnos en la manera en que aquellas sociedades del pasado que fueron más sostenibles que la nuestra, se adaptaron al medio cuando su base energética era la fuerza humana y animal o la energía del fuego. Haciendo esto habría mucho que aprender desde luego. Pero no es necesario tener que regresar a un tipo de sociedad de este tipo, puesto que ya tenemos los conocimientos y las tecnologías para vivir de forma confortable y en armonía con el planeta usando sus recursos de manera sostenible y equitativamente, sin tener que regresar a la vida dura y la miseria que había en épocas pasadas.
Creo que esta crisis es una oportunidad para dar un cambio de rumbo y empezar a construir una sociedad nueva que se base sobre principios más humanísticos y con la conciencia de los límites que nos marca la naturaleza. Pero esta sociedad nueva no puede crearse de la noche a la mañana, es necesario pasar por una época de transición, primero una transición personal en cuanto a cambiar nuestro estilo de vida para uno que comporte muchas menos emisiones de gas invernadero siendo conscientes de nuestra gran adicción al consumo, especialmente de energía. Al mismo tiempo es necesario hacer otra transición pero esta vez colectiva para crear las infraestructuras que se necesitan para vivir y adaptarse en una sociedad en declive energético y dar apoyo a las personas particulares para avanzar en esta transición personal. Pero para todo ello es preciso tener una visión de como podría ser esta sociedad del futuro hacía la que podría ser deseable ir.

Para crear esta visión nos preguntaríamos por ejemplo: ¿como será la casa en que viviré?, ¿Cómo me desplazaré para ir a trabajar? ¿Qué tipo de ropa llevare y donde se fabricará? ¿De donde llegarán los alimentos de mis comidas? ¿Qué veo cuando salgo a la calle o abro la ventana de mi habitación? O ¿Adonde me voy de vacaciones?.

Lo interesante de todo esto es pensar que vivir en un mundo con mucha menos energía que ahora puede tener repercusiones muy positivas, porque el áire y el agua será más limpios, la comida será sana y nutritiva, las personas tendrán en definitiva una mayor calidad de vida que la que hay ahora. Pero esto no viene por si solo, es necesario empezar a planificarlo mientras tenemos tiempo y recursos para ello.

Uno de los pilares de los Pueblos en Transición es el autoabastecimiento. Si nos referimos a la alimentación: ¿qué sucede actualmente con la agricultura, con la gran dependencia de las exportaciones…?

En la actualidad, la gran mayoría de alimentos los compramos en tiendas o grandes superficies que reciben su suministro gracias a que los camiones llegan a diario a lugares como Mercabarna o Mercamadrid, después de haber recorrido miles de km. El problema es que estos supermercados tienen solamente de 3 a 5 días de estoc y si en un momento dado, como es previsible y además sucedió en 2008, los camiones dejan de traer el suministro a las ciudades durante algunos días, a causa de una huelga de camioneros, por el aumento de los precios del combustible, nos vamos a quedar sin comida, así de simple. Así que deberíamos, hacer aumentar la resiliencia de nuestras ciudades y pueblos, empezando a producir alimentos tanto dentro de nuestras ciudades como en las zonas peri urbanas y en los campos en un radio de 50 100 Km, para asegurar el abastecimiento. Estos crearía además muchos puestos de trabajo y eliminaría una gran parte del desempleo actual y las contaminaciones debidas al transporte.

El problema es que el sistema actual ha destruido casi del todo, la resiliencia local, o sea la capacidad de aguantar choques externos aprendiendo a adaptarse y recuperarse y para reconstruir esta capacidad es necesaria un tiempo, así que no deberíamos perder ni un minuto y empezar a reconstruir la resiliencia, no solo del sector alimentario sino de todos los demás sectores indispensables para conducir una vida sana y enriquecedoras allí donde vivimos.

¿Qué papel juega la agricultura ecológica, la permacultura…?
Pienso que estas actividades juegan un papel clave. Sin el aporte de los combustibles fósiles no es posible mantener las granjas convencionales que necesitan de fertilizantes químicos de síntesis, herbicidas, insecticidas y funguicidas para mantener los monocultivos y combustibles para la maquinaria agrícola y para el sector del transporte de los alimentos, tal como vimos antes, así que cualquier método que permita una producción de alimentos sin necesidad de esos aportes a corto plazo será viable si no, no lo será. Y la agricultura ecológica de proximidad será cada día más viable. La FAO además ha empezado oficialmente a respaldar y alentar la agricultura ecológica como una de las formas más eficaces de proteger la soberanía alimentaria.

En cuanto a la permacultura, que es un sistema de diseño ecológico que se inspira en el funcionamiento de los únicos sistemas sostenibles que conocemos, los ecosistemas naturales, creo que tiene mucho futuro porque nos enseña justamente a observar la naturaleza y a construir asentamientos humanos capaces de resolver localmente todas sus necesidades, cuidar al planeta y a las personas, limitando el consumos de recursos naturales y repartiendo equitativamente los excedentes de nuestras producción.

La permacultura es aplicable no solamente a la producción de alimentos sino a cualquier área de la actividad humana porque es un sistema de diseño y no una técnica, así que todos los ámbitos pueden beneficiarse de la aplicación del diseño permacultural. Tanto es así que las iniciativas de transición se desarrollaron sobre la base de la permacultura y se puede decir que representan una demostración de la aplicación del diseño permacultural a sociedades enteras.

La permacultura incluye además dentro de sus principios de diseño la noción de diseñar para prevenir que eventos naturales catastróficos tengan un impacto negativos sobre los asentamientos humanos, así que nos sirve tanto para crear estrategias efectivas de adaptación frente al cambio climático como para crear las condiciones para que una comunidad local pueda aguantar los choques externos producidos por el pico del petróleo, relocalizando todas aquellas actividades indispensables para su supervivencia pacífica.

La permacultura nos enseña además a recuperar habilidades manuales, de observación del territorio y creatividad que la mayor parte de personas que vivimos en las grandes urbes hemos olvidado y que volverán a ser de fundamental importancia en una época de transición como la que tenemos adelante.

Toda esta filosofía parte de la tierra… pero se aplica por igual a las personas, a la comunidad. Hablamos de la educación, de la vivienda, del trabajo, de la economía…
En este momento histórico el gran reto que tiene la humanidad es trabajar simultáneamente en todos estos ámbitos y esto es lo que están haciendo las iniciativas de transición. Cuando se crea una iniciativa de transición, se crean grupos de trabajo para abarcar los diferentes sectores de actividad importantes para ese lugar en concreto. En algunos lugares por ejemplo, es importante trabajar entre otros, el tema del turismo, porque ahora gran parte de las entradas económicas dependen del sector turístico, así que se plantean como cambiará este sector de aquí a 20 años vistas, cuando la disponibilidad de energía habrá disminuido y la afluencia de turistas será presumiblemente mucho menor. ¿Qué otros sectores de esa ciudad tendrán que reforzarse para compensar la disminución de puestos de trabajo en ese sector (por ejemplo)?
O si se trata de una ciudad costera, es posible que una parte de la economía proceda del sector pesquero. Así se preguntarán como afectará a este sector la bajada de la disponibilidad energética y los efectos del cambio climático. Así se pueden crear diferentes escenarios y planificar los cambios año tras año hasta esa situación dentro de 20 años. En cuanto al sector de la educación, como tendrá que cambiar el sistema educativo para tener en cuenta estos grandes desafíos y enseñar a las personas a adaptarse desde temprana edad?
En pocas palabras se trata de evitar de poner todos los huevos en la misma cesta…
Una vez reunidos los planes de acción de todos los sectores de actividad importantes para el lugar, se juntan en un documento que se llama el Plan de Acción frente al Declive Energético y … si todo va bien se empieza a ejecutarlo.
Los ayuntamientos, tienen normalmente un plan director que describe como evolucionará el municipio en términos urbanisticos, energéticos, económicos, etc. Pero estos planes siempre tienen como base que aumentará el numero de coches, de carreteras, de edificios y el consumo…pero y si esto no es así? Yo no creo que tengan un plan B, por si la situación será diferente de la que han previsto. El Plan de Acción Frente al Declive Energético, podría ser el plan B que se necesite.

¿En una ciudad grande, en los barrios: pueden existir también pueblos en transición?
El movimiento de transición se desarrolló inicialmente en pequeños pueblos (Totnes tenía 8000 habitantes) y la mayoría de otros pueblos en transición son poco más grandes. Sin embargo, al poco tiempo también la gente que vive en las ciudades empezó a intentar aplicar el método de los pueblos en transición.

Lo que pasa es que dato el gran tamaño de las grandes urbes, se ha pensado que tal vez la mejor manera de aplicarlo sea a partir de los barrios o incluso en ámbitos más pequeños con una identidad precisa, , tipo calles o plazas, lugares en definitivas en que las personas puedan conocerse fácilmente y empezar a interactuar y funcionar de manera más comunitaria. Así que en muchas ciudades británicas, como Londres, Nottingham, Bristol, Edimburgo y de otros países, Los Angeles, San Francisco, Berlín, Grenoble, Paris, Lyon, Bologna, Turín, Sao Paulo, etc. han empezado a surgir iniciativas de transición en los barrios y en las calles y hasta en las favelas brasileñas.

Lo veíamos en el reportaje, la primera experiencia es en un pueblo al sur de Inglaterra. ¿Cómo está funcionando en España?
En la península ibérica, después de un periodo de año, año y medio relativamente “tranquilo”, se está produciendo un despertar de iniciativas de transición que están brotando en diferentes lugares y todo esto ha ocurrido con la llegada de la primavera de este año, así que vemos que el interés está aumentando también conforme los efectos de la crisis económica y energéticas se van recrudeciendo y las personas empiezan a buscar modelos de sociedad alternativos, donde puedan tener la posibilidad de participar activamente, en la construcción de un futuro que no sabemos con antelación como será, pero podemos hacer mucho para influenciar positivamente.

En la actualidad podemos contabilizar acerca de 20 proyectos de iniciativas de transición esparcidas por toda la península e islas, más si incluimos Portugal.

En Euskadi hay una escuela que está introduciendo en sus actividades curriculares el concepto de transición y el campus universitario de Santiago de Compostela está empezando a estudiar como ponerse en transición. En Barcelona el barrio de Sant Martí está empezando crear su grupo de transición. Algunos pueblos en los alrededores de Madrid también están dando el paso igual que en Baleares y en Canarias.

Para terminar, una reflexión: el iniciador del movimiento, Hopkins, habla del “fracaso” de la lucha de los activistas ambientales en los últimos 50 años. De nada sirven las manifestaciones… Y de nada o poco sirve concienciar sobre el cambio climático. Hay que ir más bien hacia el tema del Pico del Petróleo. “Porque a la gente le interesa más lo que entra en su coche…que lo que sale de él “………
Pienso que debemos seguir manifestándonos y dar nuestra opinión cuando la situación lo requiera, pero no puede ser la única herramienta a nuestra disposición para conseguir cambios, especialmente si estos son de gran envergadura y especialmente porque hemos visto que no es todo lo efectivo que se desearía.

Al final la mayoría de personas realizamos cambios en nuestro estilo de vida cuando las circunstancias nos obligan no por concienciación, aunque está claro que hay cada día más personas concienciadas.

Las perspectivas del cambio climático son realmente muy negras y a más largo plazo que las del pico de petróleo para que muchas personas que viven en las ciudades se sientan aludidas (aunque los últimos datos de campo recogidos por el IPCC muestran que ha habido una aceleración imprevista de algunos fenómenos como el derretimiento del hielo ártico), así que el aumento del coste de los combustibles líquidos y del gas, va a ser seguramente un detonante que ayude a que muchas más personas se planteen en serio que está sucediendo y se planteen buscar soluciones en su comunidad en lugar de esperar a que el gobierno actúe. Tal como dice David Orr: “nuestra seguridad es demasiado importante para dejarla en manos del gobierno”.
Las Iniciativas de Transición ofrecen el marco a tráves del que la comunidad puede empezar a tomar en sus manos, los asuntos que más le preocupan.

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