Uno de los grandes misterios de esta crisis, de esos que parecen dignos de una película del mismo Hollywood, es cómo puede ser que estando los tipos de interés al 1% las entidades bancarias españolas no sólo no estén abriendo la mano a la hora de los condicionados de créditos para sus clientes particulares y empresas, sino que además aún estén cobrando tipos de interés, sobre esos créditos, cercanos a un 4%.
El famoso “traslado del crédtio” no termina de llegar y muchas, pymes y autónomos, han tenido que echar el cierre por no contar con la suficiente financiación en un determinado momento como para realizar un determinado proyecto que demanden sus clientes.
La situación, que parece algo inexplicable, es evidetemente una “cortina de humo bancario” con el único fin de que éstos, los bancos, consigan recuperar parte de su déficit interno mediante una alta tasa de beneficios durante todos estos meses.
Desde un punto de vista objetivo la situación es la siguiente:
Los bancos españoles están en una situación como nunca en su historia en cuanto a liquidez.
La tasa de morosidad de sus clientes sobrepasó el 3% este año y se aproxima al 4% peligrosamente.
A falta de una “agencia bancaria nacional de venta de pisos” se encuentran en un terreno inconexo en donde no saben que hacer con más de 200.000 viviendas en propiedad ¿habrá que montar dicha agencia y, peor aún, para vender o poner en alquiler esos pisos?
Los tipos de interés de la Zona Euro bajaron hasta el 1%, una medida que sobre todo llevaba dos caminos bien definidos: ayudar a los países a que no se produjese una contracción del PIB tan pronunciada y ayudar a los agentes financieros a que hubiera una mayor circulación de dinero (pese al riesgo deflacionario que ésto podría llegar a representar).
La situación estaba (y está) tal que así, pero la ejecución definitiva ha sido arto complicada (por no llamarla irresponsable) cuando hablamos de la parte que correspondía a las entidades bancarias, y más en concreto a las Españolas.
Si comparamos la situación con el mercado EstadoUnidense es una analogía muy sencilla: Los grandes bancos Norteamericanos, tras la gran rebaja de tipos y las ayudas estatales del Plan Obama, han trasladado eso en forma de mejores precios y ofertas a sus clientes, ellos las han recibido sin recelo y eso ha provocado una reactivación del comercio minorista; algo que ha conseguido que se traslade retroactivamente ese dinero a las propias entidades bancarias. Llegaron los primeros brotes verdes, los primeros crecimientos durante el tercer trimestre del año en esas entidades y, además, es altamente probable que muchas de esas entidades devuelvan el dinero al gobierno Estado Unidense.
En España, todo esto, esta concepción, no sólo es inpensable, sino que no se puede ni entender. Por que en nuestro país, para bien o para mal, todo es un mundo aparte, una economia productiva en donde prevalece la vagancia que el esfuerzo personal y donde no pensamos que quizá lo más importante es trabajar duro si queremos ganar más; no hacer lo mínimo posible para no cansarnos y ganar lo mismo.
Volviendo al tema central, las grandes entidades financieras de nuestro país están aprovechando esta rebaja de tipos de interés para conseguir una recaptación de liquidez, mientras pierden clientes día a día; pero claro es normal, no dejan de ser entidades privadas, que responden ante sus accionistas y no antes sus clientes y que tendrán que presentar una memoria de resultados “decente” el año que viene si no quieren morir a manos de sus accionistas.
Por ende vuelvo a retomar mi idea principal de resolución de la crisis… ¿Por qué gastar tantos esfuerzos en política monetaria y fiscal no centrada? ¿No sería mejor dejar políticas populistas o electorales y centrarnos en otro tipo de políticas?
Quizá sea un loco, pero aún no entiendo como puede ser que en países como el nuestro los nuevos emprendedores tengan que sufrir muchísimo para obtener financiación o, en otro orden de cosas, cómo puede ser que necesitando un incentivo brutal del consumo privado para reactivar la economía el Estado haya decidido aumentar los impuestos vía subida del IVA del 16% al 18%.
Como siempre digo, es tan sólo mi opinión, aunque creo que como nuestra economía aún puede ir a peor, sólo debemos dar tiempo al tiempo y veremos, después de las ayudas de 200.000 millones de euros a las entidades bancarias, quienes están peor, si los bancos o las economías familiares.
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